Ilustradora: Éléonore Thuillier
Traductora: Ana Doblado
Editorial: Auzou
32 páginas
Para la Merienda de Primavera de este año, Lobo quiere preparar una tarta de manzana. El caso es que... ¡no sabe cocinar! Lobo sale al bosque totalmente decidido a encontrar a alguien que le ayude. ¿Y con quién se va a cruzar? Con los tres cerditos, con Caperucita Roja, con una bruja... ¡Ni más ni menos que las aventuras imprescindibles para elaborar la deliciosa tarta de la tía Rosita! Y al final... encontrarás la receta para prepararla tú también.
En casa nos encanta Lobo. O Lupo, así lo llama mi hijo, creo que porque es el nombre que aparece en algún otro cuento, o el que le han puesto en su clase en el cole, porque durante el primer trimestre de este curso han trabajado otro título de esta serie, El lobo que quería ser un superhéroe, ya que los superhéroes fueron la temática del trimestre. En casa solo tenemos este título. Y qué maravilla. Es uno de los cuentos que más me gustan de los que tiene, y fue elección suya, lo escogió un día que fuimos a una librería y le dejamos elegir un cuento. Creo que por entonces le llamó mucho la atención que aparecieran los tres cerditos, que ha sido su cuento favorito durante muchos meses, y sigue siéndolo.
El lobo que descubrió el País de los Cuentos es un libro algo extenso, cuando lo compramos era el más largo que tenía mi hijo, de tres años, aunque es tan entretenido y divertido que se lee muy fácil y él, acostumbrado a los cuentos, no pierde el interés en ningún momento ni se desconcentra. Lobo quiere hacer una tarta de manzana y, al salir de su casa para buscar ayuda, se encuentra en el país de los cuentos, donde se tropieza con personajes clásicos como los tres cerditos, Caperucita Roja, los cabritillos y algunos más. Que aparezcan estos personajes fue lo que más me gustó en un principio, me parecía una historia muy original y acertada al incluir otros cuentos ya conocidos. Lobo tiene que ingeniárselas para ir buscando los ingredientes para su tarta y escapar de algún que otro personaje malvado.
A mí me gusta mucho y a mi hijo también. Compramos este libro a finales del verano pasado y tuvo su larga época de gloria en la que lo leíamos cada día. Justo desde hace un par de meses está eligiéndolo de nuevo para leerlo. La historia es muy simpática, las ilustraciones son coloridas y bonitas y el personaje de Lobo es entrañable. Hay unos cuantos títulos más de esta serie para seguir la pista a este lobo tan encantador y este, en particular, lo recomiendo mucho. ¡Además! Al final del cuento está la famosa receta de la tarta de manzana de la tita Rosita.
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