Lecturas en pausa que me niego a perder de vista

Llevo una mañana un poco agitada, así que he decidido darme un descanso y escribir una entrada diferente. Se me ha ocurrido hablaros de esos libros que tengo empezados y abandonados. Debería matizar: abandonados no, en pausa, porque yo rara vez abandono un libro; puede llevar tres años en mi mesita, pero mi intención es retomarlo. Ahora que estoy en mi escritorio, si giro un poco a la derecha la cabeza, veo una montaña con varios ejemplares que, dioses, están ahí muertos de la risa, cogiendo polvo, pero que me niego a guardar porque mi intención es retomar su lectura.

No soy fan de la no ficción, pero sí lo soy de Nicholas Sparks y cuando me enteré de que tenía un libro que no se había traducido al español me lancé a por él. Eso fue hace... ¿cuatro años? Empecé Three weeks with my brother, vaya que sí, y recuerdo que me lo llevaba todos los días en el bolso y leía en el autobús en mi época estudiantil. Me da hasta pena mirarlo, porque tiene las páginas amarillentas por los cantos, y lo cierto es que el marcapáginas que tiene puesto es genial, pero ahí está, solo y abandonado. Y, oye, no es que no me estuviera gustando, para ser no ficción está muy bien, pero no sé, se ve que perdí el interés y ahora me cuesta recuperarlo. Consta de dos partes: Sparks nos cuenta, por un lado, un viaje que hace con su hermano y, por otro, recuerdos de su infancia. Es bastante curioso.

Cuando el año pasado se acercaba la Navidad empecé a leer My true love gave to me, una recopilación de relatos de amor relacionados con la Navidad. El libro es una preciosidad, me encanta la edición y los pocos relatos que he leído me han gustado. Llegué a leer solo tres, el de Rainbow Rowell, el de Kelly Link y el de Matt de la Peña. El siguiente es el de Jenny Han, así que me acaban de entrar ganas de ponerme con él. Posiblemente lo abandonara porque se pasó la Navidad y, como a mí me gusta tanto esa época, me daría pena seguir leyendo sobre ella cuando estaba tan reciente. La verdad es que podría retomar este libro en breve, ya que en nada estaremos otra vez con los preparativos navideños y al tratarse de relatos se lee más rápido.

La joyita de la corona (y estoy siendo irónica) es A man for all seasons, de Robert Bolt. Lo empecé también por esas fechas, cuando llegó la Navidad, porque era una lectura obligatoria para la Escuela de idiomas. Es una obra de teatro que narra la historia de Sir Thomas More. Se sitúa en la época del rey Enrique VIII y debo confesar que no está nada, pero que nada mal, es mejor de lo que esperaba, y lo dice alguien a quien la historia nunca le ha encantado. Llegué a leerme más o menos la mitad y lo cierto es que estoy viendo el ejemplar y lo tengo lleno de post-its. ¿Que por qué no lo acabé? Porque vi la película y perdí el interés en seguir con el libro. La trama es muy interesante y, además, narra hechos reales. Quiero retomarlo ahora que ha pasado un tiempo de haber visto la película, no pierdo la esperanza de hacerlo.

Will Grayson, Will Grayson, de John Green y David Levithan es una de esas novelas que me odio por haber abandonado. Me pilló en una época difícil en la que apenas leía, en la que tenía mucho trabajo y tenía que leer otras cosas, todas en inglés, por lo que acabé dejándolo de lado, porque en mi tiempo libre me apetecía leer en español. Me estaba gustando y me estaba pareciendo muy divertido. He pensado en hacerme con la traducción al español por la misma razón, porque por mi trabajo tengo que leer muchos libros en inglés y cuando lo hago por placer prefiero hacerlo en español, pero no lo tengo muy claro, porque, total, si el libro lo tengo para qué comprar otro. 

No sabía si incluir este último porque solo llegué a leer un capítulo, pero como está en el mismo lugar que los otros lo voy a añadir a la lista. Se trata de Écoute battre mon coeur.  Lo compré porque lo vi recomendado en un blog de una chica francesa y me llamó mucho la atención. Me da mucha pena, porque tengo el francés muy abandonado y hace bastante que no leo un libro en esta lengua (excepto un par de traducciones que he hecho en los últimos meses y un cómic de Tintín). No recuerdo nada de lo que leí, así que cuando lo retome empezaré desde el principio, pero sí me acuerdo de que había una playlist y detalles con imágenes de notas musicales y un reproductor. La música era un elemento importante en la trama. Tiene muy buena pinta y no quiero perderlo de vista, no solo porque parece una buena historia, sino porque quiero seguir leyendo en francés.

Estos cinco libros están apilados en mi escritorio, justo en la parte que hay al lado de mi cama y donde pongo mi actual lectura. Vaya, que más cerca no los puedo tener. No quiero quitarlos porque mi intención es retomarlos en algún momento.

¿Habéis leído alguno? ¿Os ha gustado? Si es así, animadme a leerlo, que me hace falta un empujoncito. ¿Y vosotros? ¿Cuáles son esos libros que tenéis empezados y que no queréis dar por abandonados?