Entre las páginas de...

La novela que está ahora en mis manos es una que descubrí investigando el catálogo de la editorial Suma de letras: El secreto de mi marido, de Liane Moriarty. No había leído nada de ella, ni la había visto en ningún lugar, y, sin embargo, me la encontré en el catálogo y atrajo mi atención: una carta secreta, un marido que parece guardar algún secreto y eso de que no sabes si conoces realmente a la persona con la que vives. ¿Qué podría decir esa carta? ¿Qué es lo que escondía ese marido? ¡Menuda intriga!

Ahora que estoy leyendo el libro tengo que decir que me está gustando mucho. La novela nos presenta a tres mujeres protagonistas: Cecilia, que encuentra una carta de su marido en la que dice que la lea después de su muerte (pero el marido sigue vivito y coleando); Rachel, que perdió a su hija hace años, que ha vuelto a encontrar la felicidad en su nieto y que ahora este se le va a muchos kilómetros de distancia; Tess, cuyo marido se ha enamorado de su prima del alma, con la que ha crecido y que es una de las personas a quien más quiere en el mundo. Las tres historias me parecen muy interesantes y estoy deseando que las mujeres se encuentren y saber qué las va a unir. 

Aunque la trama en sí me parece muy atractiva, lo que más me gusta del libro es, sin duda, cómo está narrado y cómo empatizas con él. La escritora tiene un estilo que te engancha a las páginas del libro, que te hace pegarte a él y no querer parar de leer. Me gusta mucho cómo escribe. Pero es que, además, he empatizado muchísimo con los personajes; por una parte, porque las sensaciones se describen muy bien, porque hay situaciones que te hacen pensar en tu propia vida y otras que te meten de lleno en el momento que está viviendo el personaje; y, por otra parte, porque los personajes no son tontos. Me explico, no hay situaciones típicas en que el lector ve con claridad y que el personaje pasa de largo. Por ejemplo, con lo de la carta del marido de Cecilia, la protagonista habla de que hace tiempo que no practican sexo y lo primero que se viene a la cabeza del lector es que el marido le es infiel, pues la protagonista lo piensa también. Luego, la hija hace un comentario sobre la forma de mirar del padre a su hermana mayor, y el lector automáticamente piensa que abusa de ella, y tampoco se le escapa esto a Cecilia. Es decir, que no creo que sea tan predecible como puede parecer a simple vista, porque la protagonista baraja las mismas posibilidades que el lector. Y no voy a hablar más, el resto lo dejo para la reseña. Solo me queda repetir que el libro me está gustando mucho y que espero que siga así. Estoy deseando saber qué hay escrito en esa carta.