Hablemos de Oscar y Mamie Rose

La novela que he escogido para esta entrada es la siguiente: Oscar et la dame rose (Oscar y Mamie Rose), de Eric-Emmanuel Schmitt.

Enlace a la reseña de Oscar y Mamie Rose

Esta novela, que también podéis encontrarla con el título Cartas a Dios, es una joyita y os voy a explicar por qué. Olvidáos del título, sobre todo del segundo (cómo se les ocurre) y pensad en la historia de un niño de diez años que tiene cáncer y que se va a morir. Imaginad que el pequeño escucha a escondidas una conversación en la que el doctor le cuenta a sus padres que ya nada se puede hacer por él. Pensad en una especia de niñera, una mujer que va a visitar a los enfermos al hospital, que se hace amiga de este niño y que le propone algo: escribir cartas a Dios explicándole cómo se siente cada día que pasa, e imaginar que cada día es, en realidad, diez años. 

Esta es la historia de un niño enfermo que por cada día que vive, parece como si transcurrieran diez años, como bien le propuso Mamie Rose. Es la historia de su infancia, su adolescencia, su primer amor, su primer desengaño, los celos, la madurez, la etapa adulta, la vejez... porque la enfermedad de Oscar le permite vivir todas las etapas de la vida de un ser humano a marchas forzadas. Cuanto mayor se supone que es, más avanzada está y más débil se siente.

¿Por qué considero que esta novela es especial y digna de esta sección? Porque la historia de Oscar es maravillosa, porque lloraréis, sí, pero también reiréis, porque el tiene fuerzas, valor, es un niño valiente y no se asusta; bueno, sí se asusta, pero sabe seguir adelante. Leí este libro hace unos tres años y sigo guardándolo en lo más hondo de mi corazón. Ha sido una novela tan, tan especial para mí que, por placer, me puse a traducirla, que he hecho trabajos de ella para la universidad, que he visto la película dos o tres veces y que tengo ganas de releer el libro. Sí, tiene película, aunque también ha pasado sin pena ni gloria por España, con ese título nada acertado, Cartas a Dios. Os dejo el tráiler a continuación:

Hay diferencias muy destacables entre la película y el libro (podéis ver mi entrada comparando ambos formatos clicando aquí), sobre todo en el personaje de Mamie Rose, pero el filme es tan emotivo como el libro, y nada más ver el tráiler se me empaña la visión. Esta es una historia mágica, de veras; sabes el final antes de atreverte a encariñarte de los personajes, pero la lucha de Oscar, su día a día, cómo llena de amor a todos los que lo rodean, es... inimaginable. 

Dadle una oportunidad, os aseguro que no os arrepentiréis. Y si no os apetece leer el libro, ved la película, es tan especial y bonita como la novela.