Los príncipes azules también destiñen, Megan Maxwell
Editorial: Versátil
404 páginas
Kate y Sam forman una pareja de ensueño: se conocieron, se enamoraron perdidamente, se casaron, tuvieron dos hijas y ahora viven en Nueva York y tienen su propio bufete de abogados. Tienen éxito, son felices, cuentan con gente que los adoran... pero, a veces, cuando más perfecta y preciosa parece ser la vida, todo se va al garete. Kate descubre que su marido lleva años engañándola. Sam lleva una doble vida; una vez al mes viaja a Filadelfia, donde pasa unos días con Nicole, su otra pareja, y Sasha y Tommy, los hijos que ha tenido con esta mujer. Cuando Nicole tiene un accidente mortal y llaman a Sam para informarle, es Kate quien coge el teléfono, y es de esta forma como se entera de que el maravilloso Sam, su príncipe azul, también destiñe. Kate es incapaz de perdonar algo así, por mucho que ame a Sam; él, por su parte, asume su error y se somete a las consecuencias. Tiene que cuidar de los pequeños y abandonar a su familia, y a pesar de querer con toda su alma a su mujer, no lucha por ella. Son dos personas que se aman, pero que han cometido un error imperdonable... ¿imperdonable? Los príncipes azules destiñen, sí, pero es que las princesas también.
Tema principal del libro: infidelidades. Pregunta que yo hago: ¿seríais capaces de perdonarlas? Y no hablo de un desliz de una noche, no: hablo de llevar una doble vida, de tener dos familias. Es un tema muy delicado como para tratar en esta entrada; además, casi que prefiero evitarlo, no quiero crear debate acerca de esto, a pesar de que no pueda evitar dejar ver cuáles son mis pensamientos a lo largo de la reseña. Lo que tengo claro es que es un tema arriesgado para una novela, pues toda ella gira en torno a esto, no es algo que pase a mitad o al final del libro. Por lo tanto, tenemos a una pareja perfecta, que vive una vida de ensueño, de color de rosa y que se ve detrozada por un engaño. A mí siempre me han dicho que no me fíe cuando algo parece perfecto, que seguro que tiene más fisuras de las que nos imaginamos... y eso es lo que pasa con la relación de Kate y Sam, ¿puede ser él tan perfecto y encantador? Claro que sí, si no te importa compartir a tu marido con otra mujer y dos niños más. No obstante, la cosa tampoco es tan sencilla y esta novela esconde mucho más: los príncipes azules no existen (mensaje que me ha llegado muy clarito), pero es que las princesas tampoco, porque Kate tampoco ha sido una santa, también ha cometido sus fallos, y esto hace que lo que en un principio era un «imposible, Kate, no te humilles perdonándolo» se convierta en un «ufff, esto lo cambia todo, ya no sé qué decir». Y hasta aquí mi divagación acerca del tema.
Miró hacia atrás y vio cómo se alejaba de la casa donde había sido tan feliz y donde dejaba una suegra a la que adoraba, una cuñada a la que veneraba a pesar de lo ocurrido, unas hijas maravillosas a las que idolatraba y una estupenda mujer a la que amaba. |
Aclarado el tema de la trama principal del libro, tengo que admitir que en el fondo el libro me ha gustado. Bueno, en el fondo no: me ha gustado. Soy adicta a las letras de Maxwell, y aunque en un principio (cuando leí el tema principal) pensé que esta novela iba a suponer una decepción, me he sorprendido al comprobar que no. Aunque si he de ser sincera, mis sentimientos son muy diversos: por un lado, me ha gustado mucho, pero por otro es como si yo misma me estuviera reprochando el hecho de que me haya gustado, no sé si me entendéis, pero es que cuando se trata de infidelidades, me cierro en banda. Lo bueno es que Kate y Sam no son los únicos personajes, hay muchos más y todos, incluídos los protagonistas, son maravillosos. Mención especial a Sasha, por ser un encanto de niña y arrancarme más de una carcajada; a Serena, por ser la superabuela, porque a todos nos gustaría tener a alguien así en nuestra vida; a Michael, que es todo un galán y muy buena persona (aunque es otro príncipe azul de estos que tienen riesgo de desteñir, para qué engañarnos); a Terry, por ser la personaje diez de la novela, ¡menos mal que una tiene carácter y ve las cosas como son! Y sí, también a Kate, Sam, Ollie y Cat... ¡todos! Porque cada uno tiene su encanto, y porque Maxwell siempre perfila personajes muy atractivos.
El ritmo de la novela es continuado, los capítulos, cortos y la historia engancha. Además, esta historia tiene un elemento muy, muy positivo: la ambientación. ¿Habéis soñado con visitar alguna vez Hawái? Pues gracias a Los príncipes azules también destiñen podréis hacerlo... ¡Cómo he disfrutado de estas islas paradisíacas! Ojalá mis pies puedan pisar esas tierras alguna vez, porque me he quedado fascinada con todas las leyendas, los paisajes y las costumbres que se describen en el libro.
Como punto negativo -¡y muy negativo!- no puedo olvidarme de comentar que es una grandísima pena que el libro esté lleno de erratas. Sé que ya ha salido la segunda edición, así que espero que toda esa ausencia y presencia no debida de comas, falta de tildes, erratas, falta de preposiciónes o conjunciones se hayan subsanado, porque es una pena que una novela tan buena esté tan mal presentada.
Con respecto al final, sí que quiero hacer una valoración personal, totalmente subjetiva: me hubiera gustado otra clase de final, a pesar de que haya disfrutado con este e incluso me haya emocionado. Hay un suceso antes de acabar el libro que me emocionó muchísimo (relacionado con Michael) y habría optado porque ese hubiera sido el final y que nada de lo que ocurre después hubiera sucedido (los que habéis leído el libro, sabréis a qué me refiero), pero bueno, he de admitir que, por otra parte, el que hay es el final más bonito, aunque predecible.
Esta es una novela delicada en cuanto al tema que trata, un olé por Maxwell por atreverse, por ponernos en bandeja una historia complicada e imperfecta, porque eso es lo que enriquece el panorama literario. No obstante, también es una apuesta arriesgada. A mí me ha gustado, lo he pasado genial y he disfrutado mucho, a pesar de ese runrún que tengo dentro y que me ha impedido disfrutarla al 100%.
♬ Con la colaboración de Versátil ♬
Tengo de ponerme con este libro pronto, porque tiene muy buena pinta, y Megan me encanta como escribe la verdad ^^
ResponderEliminarBesitos guapi, muy buena reseña!!
Aún no he leído nada de Megan, aunque sus libros me llaman muchísimo... Y sobre este he leído muy buenas cosas así que a ver si lo consigo pronto :)
ResponderEliminarBesitos y gracias por la reseña ^-^
Tengo muchas ganas de leerlo,haber si me hago con el,estoy de sorteo por si te animas.
ResponderEliminarHola, tengo ganas de leerlo, aunque aún ni he conseguido el de las ranas...jeje
ResponderEliminarsaludines ;)
A pesar de que el tema es un poco peliagudo, tengo que reconocer que Megan tiene narices para escribir una novela así sobre ello xD
ResponderEliminarA ver si la consigo pronto, que tengo curiosidad ;P
Besitos guapaaaa
Antes que nada, te ha quedado una reseña fantástica :)
ResponderEliminarYa sabes lo que opino. Me encantan los libros de Megan pero odio las infidelidades, así que me niego a leerlo, así de simple (y que conste que le di una oportunidad). No me creo que se pueda llegar a salvar una relación basada en mentiras. No sé lo que habrá hecho ella, pero sé lo que hizo él y eso no se perdona. Supongo que el hecho de hacer que ella cometa un error garrafal (sea cual sea) tiene como objetivo justificar de alguna manera el engaño de él. Y no, de verdad que no me creo nada. Soy bastante más cerrada que tú con el tema de las infidelidades y es que no puedo disfrutar de algo así aunque me lo proponga. En fin, ya habrán otros libros de Megan para leer. Eso sí, me parece muy valiente por su parte arriesgarse con este tema tan peliagudo y manejarlo tan bien como creo que lo ha hecho (casi todas las reseñas que he leído son positivas).
Sobre las erratas, sinceramente, no me sorprende. Esta editorial no cambiará nunca >__<
¡Un besote wapísima!
Partiendo de la base que parte, y teniendo en cuenta el final predecible, yo pasaría olímpicamente de este libro. No obstante, lo que comentas de "las princesas tampoco existen" cambia la cosa...un poco al menos, porque no creo que Kate llegue al punto del otro (es que me parece fortísimo lo del protagonista, en serio. Megan habrá sido muy valiente y todo lo que queráis, pero me sigue pareciendo algo imposible de perdonar).
ResponderEliminarDe todas formas ya probé de Megan "Deseo concedido" y no me gustó, así que quiero leer el libro que tengo de contemporánea ("Te lo dije") antes de probar cualquier otra cosa de la autora :)
Besitos wapa!! Y una pena ese runrún, pero comprensible por otro lado.
Silvia: te aseguro que sí es comparable lo de ella... por una parte, no tan grave, porque no hay niños; pero por otra... yo diría que incluso peor, por el tema del amor. Tampoco quiero decirte mucho por si quieres darle una oportunidad al final.
ResponderEliminarArsénico: no, si yo tengo el mismo problema, si a mí el tema de la infidelidad me ha impedido disfrutar de la novela como me hubiera gustado. Lo que pasa es que hay otros personajes, y si te olvidas un poco de lo de la infidelidad, está muy bien la historia. Ufff, es difícil de explicar.
Es que ais, lo de él es MUY FUERTE, y créeme, eso si que yo no lo perdonaba porque es demasiado!! lo de ella más o menos sé también y más de lo mismo, opino como Arsé la verdad... y para tirarme todo el libro mosqueada pues paso, además que últimamente los libros de Megan no me gustan como antes y tengo otros que me llaman mucho más. No te sientas mal por haberlo disfrutado! eso no quiere decir que compartas esos pensamientos.
ResponderEliminarUn besin!
Natalia: pues si lo de Kate es comparable en cierto modo (creo que entiendo lo que quieres decir con lo del amor), entonces puedo comprender que decidan darse mutuamente una segunda oportunidad. Al fin y al cabo ambos han engañado y mentido muchísimo, y en ese caso sí entiendo que se pueda empezar de cero (o casi de cero). Ha sido un buen arreglo por parte de Megan para llevar la historia a buen puerto, la verdad. Eso sí, de ahí a que yo le dé una oportunidad...buff, me parece que con ese tema como telón de fondo, de momento no XD Besitos wapa!
ResponderEliminarSe nota que es un tema muy delicado porque ya no solo trata de las infidelidades si no de llevar una vida doble. Aún así espero poder leerlo porque me encanta el estilo de esta autora :)
ResponderEliminarUn besito♥
He leído dos libros de Megan y me han encantado. También tengo otros dos pendientes y la verdad es que este último no me llama demasiado :/ Quizás cuando lea los que tengo de ella me anime.
ResponderEliminarGracias por tu excelente reseña.
¡Besos!
A mi este libro la verdad que no me llamaba nada la atención, y el tema de las infidelidades tampoco me va mucho creo que en ese sentido tengo una opinión muy formada, no sé. Por el momento creo que pasaré.
ResponderEliminarUn beso!
Me llama la atención el libro por el tema de las infidelidades y porque parece distinto a lo que nos tiene acostumbrados Megan, pero si que es cierto que las infidelidades no me gustan un pelo, y no las comprendo muy bien por eso no sé si llegaría a disfrutar del todo la historia!
ResponderEliminarUn besote guapi :D
Me encanta saber que la historia la has llegado a entender a pesar de los pesares. Entiendo que el tema "infidelidad" es un temita delicado, pero precisamente por eso quería escribir sobre él.
ResponderEliminarMuchísimas gracias por la estupenda reseña y muchos besazos para todos.
Dejando a un lado el tema de la infidelidad es una novela que me apunto. Muy buena reseña! Besitos!
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