¿Es oro todo lo que reluce?

¡Buenos días!

Hoy me he levantado con una idea rondando por mi cabecita. En realidad, es algo que llevo ya tiempo pensando, pero que en los últimos días se ha reforzado por la avalancha de reseñas que salen cada semana de una de las novedades de este trimestre que más se ha esperado: Un beso en París. 

¿Quién no ha leído, al menos, una reseña esta semana del libro? Yo he leído al menos tres. Y todas son supermegahiperultrapositivas. Esto hace que me plantee dos cosas: ¿es tan bueno el libro?, ¿se trata de una fiebre parisina que se ha puesto de moda? 

No puedo hablar del libro, no lo he leído, pero sí puedo hablar de ejemplos anteriores a este. No es la primera vez que me dejo llevar por una moda: con Retrum me pasó. Salió el libro y, automáticamente, salieron reseñas y reseñas de él; todas positivas, fantásticas, espléndidas y muchos sinónimos más. Yo leí Retrum más de un año después de su publicación, después de negarme a comprarlo porque la edición no me atraía, pero alentada por tantas buenas palabras de la gente. No me gustó. 

Lo mismo me pasó hace unos meses con otro de los éxitos del momento (de su momento): Éxodo. Nunca leí una reseña mala de este libro (en su época), por lo que esa preciosa cubierta y tantas buenas críticas me empujaron a hacerme con él. Un tiempo después (uno o dos años) empecé a ver opiniones regularcillas y más de una persona me dijo que el libro no era tan bueno y que el segundo aún era peor. No llegué ni a terminarlo, y ya sabéis mi dichosa manía de terminar todo lo que empiezo. 

Otra de las publicaciones que a mí me defraudó, esta más o menos reciente, fue Un haiku para Alicia. Hasta el día de hoy no he leído ninguna opinión negativa, y a mí el libro no me dijo nada: no es malo, pero tampoco es para echar cohetes (ojo, es mi opinión). 

¿Qué me pasa? ¿Son las expectativas que, en ocasiones, nos juegan tan crueles pasadas? ¿Realmente son estos libros tan buenos o todo va por modas? ¿Qué va a pasar cuando abra Un beso en París? ¿Me encontraré con una historia tan maravillosa como cuentan? Mis expectativas están por las nubes, eso ya no lo puedo remediar, y la novela tiene todos los ingredientes que a mí me animan a leer un libro (aunque recientemente me he enterado de que hay un personaje basado en mi escritor preferido y que no es lo que se dice un personaje entrañable, jum). Puede que en este caso me ocurra lo que me pasó hace ¿cuántos?, ¿tres años? cuando vi en un blog (lo siento, no recuerdo cuál era) una encuesta en la que se preguntaba a la gente si le había gustado Los juegos del hambre y solo tres personas decían que no (y más de cien votó que sí). Fue esa encuesta la que me convenció, no las reseñas ni las opiniones que leí anteriormente. Y esa vez sí que hice bien, y me enganché a una trilogía imprescindible. Esto me ha pasado en muchas más ocasiones, pero en fin, ¿qué le voy a hacer? Será que tanta reseña de la misma novela me satura, será que espero tanto de ella que tengo un miedo atroz a que me decepcione (porque he visto una crítica que no la pone tan bien, y porque me fío de esa persona).

En fin, ya os contaré qué me parece a mí el libro en una reseña que haga que la gente como yo se sature un poquito más. Cruzaré los dedos, aunque estoy casi segura de que me encantará. Deseadme suerte.