No-Reseña: Éxodo, Anissa B Damom

Éxodo, Anissa B. Damom

Editorial: Ámbar

456 páginas

Voy a darte los tres consejos que a mí no me dieron.
Este es el primero:
Olvida todo lo que te han contado: los vampiros no existen, los lobos son solo animales y los magos, las hadas y los duendes se encuentran encerrados en grandes tomos de hojas desgastadas.
Quiero mostrarte la otra cara del mundo.
Un lugar donde el peligro se enmarca en perfectos rostros de porcelana perlada, el amor es como una bestia salvaje sedienta de sangre que acecha y te arranca el corazón mientras estás dormido y la felicidad... la felicidad es un delito que se paga muy caro.

Texto sacado de la sinopsis del libro

Más que una reseña, esta es una no-reseña, pues no he terminado de leer la novela; es la primera reseña de este tipo que hago en el blog en más de tres años que tiene de vida. Los que me leéis con asiduidad sabéis que soy la chica «anti-dejar-los-libros-a-medias». No, no me gusta dejar inconcluso un libro que he empezado con ilusión, y esto es por un motivo: si hubiera hecho esto hace unos cuantos años con una novela que no me enganchaba ni a la de tres y que me aburría, nunca habría conocido la maravillosa historia que esconden las páginas de La sombra del viento (me enganché a la segunda mitad de la novela, pero la primera me costó horrores leerla). Desde entonces tengo mi norma personal. Sé que muchos pensarán que es una tontería, que con los libros que hay es una idiotez empeñarse en leer uno que no me gusta. Y en muchas ocasiones es así, pues rara vez un libro que a la mitad sigue sin llamar mi atención se convierte en una maravilla, pero con La sombra del viento me pasó, y ya tengo miedo a dejar pasar joyitas por precipitarme. Con Éxodo he roto mi regla, y me ha costado, pues una novela de la que he leído montones de reseñas más que positivas, comentarios extraordinarios y decenas de «tienes que conocer a Christian Dubois» es difícil de dejar de lado. Pero es que he estado más de dos meses dándole «otra» oportunidad a Lena, y ya no podía más. Además, después de pedir opiniones más personales y de poner alguna que otra entrada en el blog, he comprobado no solo que existen personas a las que esta novela no les ha gustado, sino que además la segunda parte parece ser peor. Así que libro cerrado y a otra cosa, mariposa.

¿Qué me ha pasado con Éxodo? No quiero extenderme mucho, así que iré al grano. Primer punto: la protagonista es insufrible, ese es el principal y más importante fallo. Me costó entender qué le pasaba, pues de repente me encuentro a una tal Lena pidiendo a un chico que acaba de ver que la mate. A partir de ahí, la chica se empecina en lo mismo: mátame, mátame, mátame. Segundo punto: ¿dónde está el encanto de Christian? A casi doscientas páginas leídas de la novela no he encontrado por qué este chico atrae tanto, aunque puede ser que su vena romántica aparezca más adelante. Tercer punto: le he dado decenas de oportunidades, lo he dejado, he seguido, he vuelto a insistir, pero ni la historia me parece atractiva, ni me engancha. Para mí ha sido una lectura aburrida, muchas noches tenía que dejar el libro tras leer solo un par de páginas porque se me cerraban los ojos (y no de sueño, sino de aburrimiento). A mi modo de ver, no tiene nada que la haga especial o diferente, quizás un poco los seres que hay, que sí, son distintos, pero que yo no los he terminado de comprender ni he conocido bien (mea culpa, posiblemente este detalle se desarrolle más).

En fin, esta novela no es para mí, y prometo que lo he intentado, pero es que nada más de verla y pensar en seguir un poco, se me quitaban las ganas de leer y, chicos y chicas, eso no es bueno. Las decenas de reseñas positivas que hay de la saga posiblemente estén ahí por algo, puede que más adelante la historia mejore, puede que se convierta en una gran novela, pero eso yo ya no lo voy a saber.

♬ Con la colaboración de la editorial Ámbar ♬