Un paseo para recordar, Nicholas Sparks

No voy a decir de nuevo que Nicholas Sparks es mi escritor favorito, ni que todas las historias que he leído suyas son más que geniales, ni que reservo los libros que tengo de él para leerlos poco a poco y así tener siempre uno guardado para poder pensar que no tengo que esperar hasta que saque alguno nuevo. Vale, ya lo he dicho, pero merecía la pena. Por fin, y repito, por fin. Un paseo para recordar ha pasado por mis manos. Quiero decir, antes de empezar con la reseña, que las citas las he traducido yo del inglés, así que probablemente no coincidirán con las del libro en español.

Un paseo para recordar, Nicholas Sparks

Landon tiene cincuenta y siete años y nos cuenta la gran historia de amor que tuvo la suerte de vivir cuarenta años antes.

Beaufort (Carolina del Norte), 1958. 

Landon Carter es un chico normal de diecisiete años. Vive en el seno de una familia rica, tiene una madre adorable y un padre que, por su profesión, no está nunca en casa. Es un chico rebelde, más que nada por la situación familiar que le ha tocado vivir. 

Jamie Sullivan es una chica dulce y adorable. Su padre es el reverendo del pueblo y ella va siempre con una Biblia bajo el brazo. No le importa lo que los demás piensen de ella, no viste como el resto de la gente y dedica su tiempo libre a ayudar a los demás.

Landon y Jamie son dos personas totalmente diferentes cuyos caminos se cruzarán en un baile del instituto. Landon no tiene acompañante y decide pedírselo a Jamie, ella acepta. Poco a poco, esta pareja tan atípica, irá compartiendo más y más tiempo y acabarán enamorándose, a pesar de las burlas que tiene que soportar él por parte de sus amigos, a pesar de que ella guarda un gran secreto, un secreto que cambiará el rumbo de sus vidas.

Mi nombre es Landon Carter y tengo diecisiete años. Esta es mi historia, prometo no dejarme nada. Primero sonreiréis y, después, lloraréis. No digáis que no os lo advertí.

Mi historia con Un paseo para recordar viene de largo. Hará más de cinco años que una amiga me recomendó ver la película. Yo no había oído hablar de ella en la vida, pero me fié y la vi. Me enamoró. Poco después, descubrí la película de El diario de Noa, pero no llegué a relacionar las dos historias. Cuando descubrí que ambas tenían libro y que eran del mismo autor, comencé a leer a Nicholas Sparks, un libro tras otro. Puede que me leyera cinco libros suyos seguidos. Pero nunca encontré Un paseo para recordar, descatalogado y casi imposible de encontrar. Desde entonces ha durado mi búsqueda, pero en mi viaje a Edimburgo, no lo dudé y me hice con A walk to remember, la versión original de la novela. Y es así como por fin llegó la historia a mí.

La historia de Landon y Jamie me ha vuelto a emocionar. Pensaba que me costaría leerlo, porque no estoy acostumbrada a leer novelas en inglés, pero todo lo contrario, me ha resultado muy fácil de leer y me ha cautivado tanto como si lo hubiera hecho en español. Es más, me alegro de haberlo leído en inglés, porque, por fin, he podido leer de primera mano cómo escribe mi autor preferido, sin traducciones de por medio. Y chicos, ME ENCANTA. He visto como unas seis o siete veces la película, pero he intentado que no me influyera a la hora de leer la novela. Solo voy a decir una cosa respecto a la película, pues ya haré en su momento una entrada dedicada a eso: hay más diferencias que similitudes en la historia.

Un paseo para recordar es un libro que no podría recomendar a todo el mundo por el tema que trata, y digo esto porque la primera vez que vi la película lo hice con una persona que había vivido un caso similar y lo pasó muy mal. Es un libro triste, muy triste, pero también es un libro lleno de esperanza y amor. No he leído una historia de amor más dulce que la de Landon y Jamie, en serio. Son dos personas muy diferentes pero que saben llevarse a la perfección y entenderse. Landon va conociendo a Jamie y se enamora de ella poco a poco, sin prisas, una vez que ve lo que hay en su corazón y no en su fachada. 

Miré a Jamie, después al techo y al resto de habitación, haciendo lo posible por guardar la compostura, y de nuevo a Jamie. Ella me sonrió y yo le sonreí, y todo lo que pude hacer fue preguntarme cómo era posible que me hubiera enamorado de una chica como Jamie Sullivan.

Conocemos la historia desde el punto de vista de Landon, y creo que es un acierto, ya que es él quien sufre la mayor evolución, el que pasa de ser un chico al que sí que le importa lo que los demás piensen a darse cuenta de que, por amor, es capaz de hacer cualquier cosa. Landon es el verdadero milagro de la historia.

Del autor, poco más puedo decir que no sea nuevo. ES EL MEJOR. No me imagino a Sparks escribiendo una novela que no fuera de amor y, realmente, es algo que me intriga: ¿se le daría igual de bien? Lo que está claro es que no hay nadie como él para escribir historias románticas y para hacerte sentir exactamente lo mismo que sienten los personajes. El único fallo que le veo a Un paseo para recordar es que es una historia demasiado corta, me hubiera gustado que tuviera más páginas, y, quizás, más momentos diferentes a los de: te acompaño a casa, leemos juntos la Biblia. Pero esa es la magia de Sparks: que hace de escenas tan cotidianas, momentos especiales.

No fue especialmente largo, y, posiblemente, no fue el tipo de beso que podáis ver en las películas, pero fue maravilloso, y todo lo que puedo recordar del momento es que cuando nuestros labios se tocaron por primera vez, supe que el recuerdo duraría eternamente.

Esta vez no es una de las novelas de Sparks de 5/5, porque creo que las tiene mejores pero, aun así, me ha encantado y me he enamorado una vez más de su pluma. Siento que no sea posible comprarla en español, sinceramente, ¿a qué esperan para reeditarla? pero si tenéis la posibilidad de leerla en otro idioma, hacedlo, merece la pena.

Ráting Melódico: 

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