Los diarios secretos de Miranda, Julia Quinn

Tengo esta novela gracias a las chicas de Pasajes románticos, que organizaron un concurso en su blog y yo resulté ganadora. Una vez más, me adentro en la romántica adulta, y una vez más quedo sumamente satisfecha.
Voy a dejar la sinopsis del libro esta vez.

Los diarios secretos de Miranda, Julia Quinn

A sus diez años de edad, la pequeña y tímida Miranda Cheever escribe un diario íntimo en el que va volcando todas sus ideas y sentimientos. Allí dejará apuntado el gran secreto de su vida: el 2 de marzo de 1810 se enamora de Nigel Bevelstoke, vizconde Turner, quien derrite su corazoncito con la promesa de que en el futuro será una dama culta y hermosa. Pasan unas cuantas temporadas y Miranda se convierte en lo que Nigel predijo. Ahora está dispuesta a seducir al hombre que encendió su amor desde que era una niña, pero no cuenta con que el paso del tiempo no ha sido benévolo con su amado, que se ha transformado en un ser hosco y solitario.

No sabía por qué libro empezar, si por este o por Una luz en la ventana, el otro que gané en el mismo concurso, lo que sí sabía era que quería leer algo de romántica adulta ya. Y, aunque espero que el otro libro me guste muchísimo también, me alegro de haber escogido este, pues me ha encantado.

La historia comienza cuando Miranda tiene tan solo diez años y, como dice en la sinopsis, se enamora de Nigel Bevelstoke, Turner. Me ha gustado mucho esa conversación que tienen cuando él la acompaña a casa, aunque Miranda habla con una madurez muy poco propia de su edad. A continuación, Miranda ya tiene diecinueve años.
Esta es una preciosa historia de amor, en la que se expresan los sentimientos de Miranda, que está profundamente enamorada del hombre que tan amable fue con ella cuando era una cría, el único que confió en que se convertiría en una joven hermosa e inteligente. Es una historia dulce, romántica, tierna, bonita.

- Los labios carnosos son mucho mejor que los labios finos- dijo Turner, enfatizando las palabras. Aquella niña tan graciosa le caía bien y quería que se sintiera mejor. - ¿Por qué? Turner lanzó una disculpa silenciosa a los dioses de la etiqueta y el decoro antes de responder. - Los labios carnosos son mejores para besar.

La narración es lo que más me ha gustado de esta preciosa historia. Me encanta la forma de escribir de Julia Quinn, de quien no había leído nada anteriormente. Los diálogos de la novela son un punto fuerte. Me ha sorprendido la cantidad de muletillas que se emplean a lo largo de la historia, que dotan de un aire de espontaneidad a las conversaciones y hacen que la narración sea fluída y cercana. Me gustaría haber leído algun fragmento de la novela en inglés, la lengua original, para ver qué dice la autora realmente cuando la traductora ha decidido poner tantos diablos, demonio, Dios, santo cielo, etc.

- Discúpese con la señorita o haré que lo lamente.[...] - No tengo nada de qué disculparme. La mujer ha entrado en mi tienda... - Ah, diablos- farfulló Turner. Ahora ya era inevitable. - Ha molestado a mis clientes, me ha insultado... Turner cerró el puño y golpeó al librero en la nariz. - Dios mío - suspiró Miranda-. Creo que le has roto la nariz. Turner le lanzó una mirada mordaz antes de centrarse en el librero, que estaba en el suelo. - No creo. No sangra tanto.  - Una lástima- murmuró ella.

El ritmo me ha parecido más que aceptable. Personalmente, la novela me ha resultado muy fácil de leer y la he devorado en apenas dos días.
Con respecto a los personajes, solo tengo buenas palabras para ellos. Miranda no es una chica guapa y ella lo sabe, pero es sumamente inteligente, con una lengua afilada, fiel a su mejor amiga (que, además, es la hermana de Turner). Es muy madura y está enamoradísima de su príncipe azul, sería capaz de cualquier cosa para conseguirlo, aunque ello conlleve el perder su honor.  Turner es encantador al principio, pero su esposa fallecida ha hecho de él otro hombre, lo ha transformado en un ser despreciable. Sin embargo, sigue conservando cierto encanto, es sarcástico e incapaz de contener una extraña atracción que siente por Miranda. Aunque, en ocasiones, he tenido ganas de soltarle un buen tortazo, me ha gustado, y su evolución me ha fascinado (ainssss, qué lagrimillas he soltado al final de la novela).

- Cualquiera que te conociera antes de tu matrimonio se habría dado cuenta de que eras infeliz. - ¿Por qué?- La miró, y ella vio algo tan urgente en sus ojos que sólo pudo decirle la verdad. - Solías reír- dijo, en voz baja- Solías reír y tus ojos brillaban. - ¿Y ahora?  - Ahora eres un hombre frío y rudo.

Un detalle que me gustaría comentar es algo relacionado con la portada. En el libro, se hace especial hincapié en que Miranda es morena (es una de las razones por las que no se considera una mujer guapa) y que Turner es rubio. Pues en la portada él es moreno y ella rubia, justo al contrario. Es una tontería, pero ya que es algo que se repite mucho a lo largo de la historia, ya podrían haber usado el photoshop para tintarles el pelo.

En definitiva, esta historia me ha encantado. Ha hecho que sonría, que ría, que suspire, que tenga ganas de gritar, que grite y que suelte alguna que otra lágrima. Es una preciosa historia de amor, que no se sabe si tendrá un final feliz y para ello habrá que leer hasta la última de sus páginas. Sin duda, repetiré con esta autora, cuya forma de escribir me ha gustado tanto. ¡Cuántas citas tengo apuntadas de esta genial novela!

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