Dos velas para el diablo, Laura Gallego

¿Cómo podía ser posible que yo no hubiera leído todavía nada de Laura Gallego? Pues sí, así era, hasta que llegó a mis manos Dos velas para el diablo, un libro que mucha gente me había recomendado y que yo he disfrutado muchísimo.

Dos velas para el diablo, Laura Gallego

Hoy día, ya nadie cree en los ángeles. Sin embargo, hay gente que sí cree en los demonios. Pero los ángeles existen y han existido siempre. ¿Que cómo lo sé? Porque mi padre era uno de ellos. El problema es que, cuando los ángeles te dan la espalda, ¿en quién puedes confiar?

Cat tiene dieciséis años y su padre acaba de morir. No ha sido una muerte natural, Iah-Hel ha sido asesinado por los mismos demonios con una espada demoníaca, lo único que lo puede matar. Pero es que Iah-Hel no era un humano cualquiera, era un ángel. Cat ha cogido la espada de Iah-Hel y ha hecho un juramento: vengará la muerte de su padre, descubrirá y matará a su asesino. Pero Cat es una humana normal y corriente y eso de buscar y matar demonios no está hecho para ella. En su búsqueda se encuentra con Angelo, un demonio que la ayudará en su misión. Cat no está muy contenta de tener que trabajar con demonios, al fin y al cabo, ellos son los malos, pero Angelo es el único que se ha interesado por echarle una mano y juntos buscarán qué hay detrás de la muerte de su padre, por qué persiguen a Cat y cuál es la verdadera razón que se esconde tras la lucha entre ángeles y demonios.

Hacía tiempo que tenía ganas de leer algo de esta autora, de quien tantas maravillas he leído/escuchado. Y no he podido empezar con un libro mejor. Sé que muchos alaban Memorias de Idhún, quizás realmente sea una maravilla, pero Dos velas para el diablo no se queda atrás.

Tenemos una historia de ángeles, la segunda que leo (la primera fue Hush, Hush). Pero esta vez son unos ángeles diferentes, y unos demonios diferentes. Se trata de los ángeles y demonios de la Biblia, los ángeles de Dios, y los demonios del mismo Lucifer. Podremos encontrar a personajes tan conocidos históricamente como el arcángel Gabriel, Rafael o Miguel. La novela tiene una carga histórica religiosa bastante alta, por lo que adivino que la autora ha debido documentarse mucho y bien para escribirla. Sin embargo, y aunque esos personajes aparezcan, los protagonistas de la novela son Cat, una humana, y Angelo, un demonio menor, que tendrán que ir investigando, buscando pistas, encajando piezas para descubrir qué se esconde detrás de la muerte del padre de Cat y descubrir que no es algo tan sencillo como que se pueda atribuir al odio que se tienen los ángeles y demonios, sino a una guerra mayor, algo mucho más importante, en lo que también están involucrados los humanos.

- ¡Espera, demonio! - lo retengo, y entonces caigo en la cuenta de que ni siquiera sé su nombre-. ¿Cómo te llamas? Me dirige otra de sus sonrisas sesgadas. - Angelo- responde. - Ah, venga ya. - En serio.- Sus ojos brillan en la oscuridad, divertidos.

Cat es una chica valiente, a la que no le importa arriesgar su vida por vengar la muerte de su padre, aunque en ocasiones es demasiado temeraria, y se pone en peligro por no pensar en las posibles consecuencias de sus actos. No tiene pelos en la lengua y siempre dice lo que piensa. Angelo es un demonio, y por lo tanto, está en su naturaleza ser malo, pero es un demonio atractivo, irónico y, en cierta medida, amable.

Con esta novela, no he podido resistir la tentación de ponerme del lado de los demonios, de preferirlos a ellos. Suele pasar, ¿no? cuando los protagonistas son los malos, a ellos son a los que apoyamos (si no, ved Ocean's 11,12,13...). Está claro que los demonios son los malos de la historia y los ángeles los buenos, pero por alguna causa, siempre se ha dicho que los extremos nunca son buenos, y ellos representan el extremo de la maldad, por un lado, y de la bondad, por otro. Los humanos estamos en medio.

La verdad es que no creo que haya alguien que haya leído esta novela y no se haya puesto a reflexionar. Pues sí, es una novela para abrir los ojos al mundo (o a una pequeña parte de él). ¿Qué es lo que estamos haciendo los humanos, sino destrozar todo lo que nos rodea? El universo está muriendo y nosotros somos los culpables... y eso es lo que nos quiere transmitir Dos velas para el diablo, un mensaje que no me ha dejado indiferente.

Aunque al principio se me hizo raro el libro, pues me costó acostumbrarme a que la protagonista contara la historia en primera persona y en presente, ha ido a mejor conforme he ido leyendo. Página a página, me ha ido gustando, cada vez más. Y los últimos capítulos los he devorado, sin pensar, sin darme siquiera cuenta, hasta llegar a ese final, un final que sospechaba (en lo que a Cat se refiere) pero que me ha arrancado más de una lágrima.

¿Por qué nos gustan tanto los personajes malos? ¿Por qué son tan irremediablemente sexys? Sea por lo que sea, Angelo me ha fascinado, y para mí, ha sido lo mejor de la novela, a pesar de esas alas de oscuridad que le cuelgan de la espalda.

Si los ángeles pueden matar, ¿por qué los demonios no podemos amar?

Ráting Melódico:

Gracias a la editorial SM por haberme enviado el libro