Traductora: Natalia Navarro
Editorial: Destino
296 páginas
Cuando Lylah y sus amigos recibieron el anónimo, lo tomaron a broma. ¿Un admirador secreto? Parecía una tontería por la que no merecía la pena preocuparse.
Ese fue el primer error.
Porque pronto uno de ellos desaparece... y aparece un nuevo mensaje:
SERÁS MÍA.
Ese fue el primer error.
Porque pronto uno de ellos desaparece... y aparece un nuevo mensaje:
SERÁS MÍA.
(Sinopsis de la editorial)
¡Cuánto tiempo hacía que no leía un thriller! Y encima uno con un asesino en serie. ¡Y juvenil! Cuánto tiempo sin barajar entre varios sospechosos y cambiar constantemente de opinión acerca de quién es el asesino. Os voy a contar una cosa: pensé que este libro sería muy predecible, pero no ha sido así.
El anónimo es una novela sobre seis amigos universitarios que viven juntos en una casa. Un día, empiezan a recibir amenazas y estas se van cumpliendo. Hay un acosador, un asesino, y ellos tienen muy claro quién es. Desde casi el principio, los personajes dejan de referirse al culpable como «asesino» y le ponen nombre. Pocas veces se hace referencia a él en la novela como un desconocido, pues enseguida tenemos al culpable. Y, por supuesto, eso me hizo descartar de inmediato a ese culpable. ¿Cómo van a saber quién es desde el inicio y va a ser ese? Para mí, no tenía sentido. Así pues, empiezas de inmediato a sospechar de todos los demás, de los mismos amigos, de los familiares, de los conocidos, ¡de todos! Yo me las di de lista en esta historia, pues en un principio sospeché de un personaje al que poco después le añadí un cómplice. Leía la novela teniendo muy claro quién era el asesino o la asesina, y, de ese modo, cometí el mismo error que los personajes y que los detectives encargados del caso: me centré en alguien y dejé de ver más allá. No os voy a negar que también tuve otros sospechosos, y el verdadero culpable era mi segunda opción por motivos que yo adiviné, pero iba muy por detrás de mi primera opción, que para mí era la verdadera. Cuando releí la novela, empecé a darme cuenta de que la autora había jugado conmigo totalmente. Yo pensaba: nadie va a sospechar de esta persona y por eso va a ser el culpable. Pero sí, sí hay momentos en los que se sospecha de esa persona, tanto de mi asesino como de mi cómplice, por lo que no estaba siendo yo tan inteligente como creía. De hecho, hay momentos en los que se sospecha prácticamente de todo el mundo. Así pues, yo que decía «buah, lo he adivinado a la primera, qué poca gracia», he acabado pensando «¡qué fuerte!, pues si está bien el misterio».
Me ha gustado El anónimo, aunque el final me ha dejado trastocada. El caso queda cerrado, pero el último párrafo da pie a una segunda parte y deja el final totalmente abierto. He leído que la autora suele recurrir a estas estrategias, que le gusta dejar finales abiertos, así que supongo que tendremos que aguantarnos y pensar en el final que nosotros queramos. O, quién sabe, tal vez nos sorprenda con una continuación.
Me ha gustado El anónimo, aunque el final me ha dejado trastocada. El caso queda cerrado, pero el último párrafo da pie a una segunda parte y deja el final totalmente abierto. He leído que la autora suele recurrir a estas estrategias, que le gusta dejar finales abiertos, así que supongo que tendremos que aguantarnos y pensar en el final que nosotros queramos. O, quién sabe, tal vez nos sorprenda con una continuación.
El anónimo es una novela de suspense con un asesino en serie todopoderoso que parece lograr todo lo que se propone. La historia despista, te hace sospechar de mucha gente y el final sorprende. A mí me ha gustado, a pesar de ese final abierto con el que deseas tirarte de los pelos.
Hola, gracias por la reseña. Pinta bien, quizás más adelante me anime.
ResponderEliminarNos leemos
No me llama mucho la atencion aunque no lo descarto del todo.
ResponderEliminarSaludos
Holaa! No conocía esta obra pero no descarto leerla
ResponderEliminarMe ha gustado mucho tu reseña :D
Un saludo grande y gracias por tu sinceridad
¡Hola!
ResponderEliminarTiene muy buena pinta, me lo apunto ya de ya.
Un beso.