Querido John, Nicholas Sparks

Querido John, Nicholas Sparks

Traductora: Iolanda Rabascall

Editorial: Roca

318 páginas

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John Tyree es un un muchacho rebelde que vive en Carolina del Norte. Después de pasar una infancia complicada sin madre y con un padre obsesionado con la numismática decide alistarse en el ejército para poder huir de su pueblo y de su disfuncional familia. Sin embargo, en uno de los permisos que se le conceden, volverá a su ciudad natal y allí conocerá a Savannah. Ella es su completo opuesto: una brillante estudiante que pasa el verano construyendo casas para los sin techo. Los dos jóvenes se enamoran perdidamente y cuando John tiene que reincorporarse a las filas deciden esperar a que él pueda licenciarse de su carrera militar para poder emprender un proyecto de vida juntos. Las visitas de John a Savannah se suceden y en ellas el amor que sienten el uno por el otro no hará más que aumentar. John conseguirá además, con la ayuda Savannah, descubrir el porqué del alejamiento de su padre y reconciliarse con él. A pesar de todo esto, algo que excede a su control sucede: los cruentos atentados del 11 de septiembre que sumen al país en la alerta roja militar. John tendrá entonces que tomar la decisión más difícil de su vida, la de optar entre el amor a una mujer y el amor a su país.

(Sinopsis de la editorial)

¡Ya era hora! Me compré este libro cuando salió a la venta, hace unos cuantos años ya, pero, no sé por qué, he ido leyendo el resto de novelas del autor y dejando esta de lado. Hacía además tres años que no leía nada de Sparks, y eso que tengo algunos libros de él aún pendientes, y que es uno de mis autores preferidos. Ha sido todo un placer reencontrarme con él, a pesar de haberlo hecho con una novela cuya protagonista es bastante insufrible, con una historia que, ni de lejos, es la mejor. No obstante, igual ha sido la mejor elección de título, pues tenía tantas ganas de volver a leer a este autor que estaba segura de que iba a disfrutar el libro, y así ha sido, a pesar de las cosas que no me han gustado.

Mi principal problema con Querido John tiene nombre: Savannah. Qué pena, porque he leído el libro con la imagen de Amanda Seyfried en la mente (la actriz que da vida a este personaje en la película); esa chica me gusta y me da que la peli, cuando la vea, va a conseguir que le tome un poco de manía. No me ha gustado la personalidad de Savannah y tampoco me ha gustado su comportamiento. Yo sé que los libros de Sparks tienden a adquirir un tono religioso importante, cosa que no me molesta en absoluto, pero es que Savannah, cuya forma de vida no puedo criticar, tiene una actitud muy moralizante. Me parece perfecto que no beba, que no se acueste con chicos, que para ella ciertas cosas sean importantes, que no se deje influenciar por los demás... pero de ahí a ser tan intolerante y condenar a la gente que sí hace cosas como tener un lío en la playa... pues no. Qué irónico que después de conocer a la Savannah veinteañera con esos valores tan fuertes nos encontremos con una Savannah más madura que bebe vino para superar el día a día. Pero es que también tiene su particular modo de vivir sin contar con los demás; me irritó sobremanera su comportamiento cuando John la visitaba (tanto en el «antes» como en el «después», rozando ya el final de la historia). Me ha parecido una chica pánfila y bastante egoísta, sobre todo cuando las situaciones se tornan difíciles para ella. 

John, por su parte, me parece un pedazo de pan, cosa que me gusta por una parte, pero por otra me irrita un poco. Su perfil no encaja para nada con el de Savannah, pero bueno, dicen que los opuestos se atraen, así que nos lo creeremos. Pero es que se vuelve el clásico calzonazos, y no. Y mucho menos cuando la chica no lo merece. John me ha gustado mucho como personaje, pero, sin duda, no merece lo que le va sucediendo página tras página. Seguir su historia me ha roto el corazón de todas las formas posibles.

Personajes aparte, diré que Sparks siempre me ha gustado y sigue gustándome tantos años después. Tal vez decir que es mi escritor preferido sea una exageración a estas alturas, pero sin duda sus historias me hacen feliz (aunque muchas de ellas sean dramáticas). Es curioso que, por norma general, prefiera las historias más dialogadas que descriptivas y que tengan giros que me sorprendan, porque Nicholas Sparks es todo lo contrario a eso: sus historias son lentas, tienen poco diálogo y abundantes descripciones, suelen narrar escenas rutinarias, momentos del día a día, conversaciones sencillas. Y, sin embargo, me encantan. Sparks tiene algo especial, de eso no hay duda.


Querido John no es la mejor novela de Nicholas Sparks, principalmente por culpa de la protagonista femenina, que se hace insoportable. El romance, en este caso, ha sido lo que menos me ha gustado de este libro; qué suerte que la historia de John sea tan interesante como para destacar más allá de su historia de amor con Savannah, y qué suerte que su padre sea tan adorable.