Esa sensación de que no encontrarás nada mejor

Iba a escribir esta entrada en mi blog de traducción, pero me he dado cuenta de que, puñetas, no solo es que no pase unicamente en la traducción, sino que, además, a mí me ha pasado en mi vida como lectora. Millones de veces. ¿Conocéis esa sensación de leer un libro, terminarlo, quedarte en el sitio con una sonrisa tonta en la cara y la sensación de que, leas lo que leas después, no te va a gustar?, ¿de que no habrá un libro en tu vida que haga sentir igual? Pues eso.

El caso es que estoy en pleno momento «no voy a encontrar un libro mejor que el que acabo de terminar». No puedo deciros el título (aún), lo siento, porque se trata de mi última traducción, pero sí os puedo decir que tengo entendido que saldrá a la venta en septiembre y que es, de verdad, un libro maravilloso. Tanto personajes, como historia, como lugar en que se sitúa la acción, como época en la que transcurre. Es, simplemente, maravilloso. He traducido unas cuantas novelas y con todas he aprendido algo. No os imagináis la de cosas que se pueden aprender traduciendo, y traduciendo ficción. Pero, sin lugar a dudas, con esta última traducción es con la que más he aprendido, ya que la acción se sitúa en un momento del pasado y hay muchos elementos históricos que, dicho sea de paso, me han fascinado.

Pero de esto puede que os hable en su día. De lo que realmente quería hablaros hoy es de esa sensación que ahora mismo me embarga y me hace pensar que no hay libro mejor que el que acabo de cerrar. Estoy segura de que, sea cual sea mi próxima lectura, va a estar afectada por el recuerdo de esta y que no hay nada que pueda hacer para evitarlo. Es así. No es la primera vez que me pasa, ¡en absoluto!, hace no mucho me sucedió lo mismo con un libro que leí para un informe y que espero que publique la editorial, pero es que me ha pasado mil veces con mil novelas diferentes (e incluso con películas), por lo que sí, sí encontraré nuevas lecturas maravillosas que me hagan ser inmensamente feliz, aunque ahora esté empeñada en que no.

¿Conocéis esa sensación? ¿Con qué libros os ha pasado? De mis últimas lecturas, yo sentí lo mismo con Te daría el mundo. Fabulosa. Hay muchas novelas que me han encantado, pero el sentimiento del que os hablo va más allá de puntuar una lectura con un 5/5, es saber que esa historia te va a acompañar siempre en el corazón. Me entendéis, ¿verdad?