Contra la fuerza del viento, Victoria Álvarez

Contra la fuerza del viento, Victoria Álvarez

Editorial: Lumen

522 páginas

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Inglaterra, 1905. Han pasado unos años desde los acontecimientos narrados en Tu nombre después de la luvia y la vida ha sido generosa con el equipo del periódico Dreaming Spires. Nada parece poder perturbar su tranquilidad, pero a finales de mayo los tres amigos reciben la visita de la bella y misteriosa señorita Stirling, que luce sus mejores galas y acude a la ciudad con una tentadora oferta para ellos.

Alexander, Lionel y Oliver, acompañados por la excéntrica Veronica, acceden a acompañarla a una aldea cercana a Nueva Orleans para descubrir qué hay de cierto en la leyenda del Perséfone, un bergatín hundido misteriosamente en el río Mississippi en 1862. Nada queda del barco, y al principio la gente del pueblo parece poco dispuesta a recordar el pasado, pero al cabo de unos días sabremos mucho del trágico destino de sus marineros, y puede que incluso se revele algo de la verdadera historia de la señorita Stirling...

(Texto extraído de la contracubierta)

Me ha durado bastante esta novela, pero me alegro, porque leerla tan poco a poco me ha permitido saborearla, disfrutarla, descubrirla lentamente. A veces, cuando termino un libro en dos o tres días, tengo la sensación de no haberlo aprovechado, de haber perdido la oportunidad de disfrutar de verdad con él. Hay libros y libros, claro, algunos son perfectos para leer en un par de ratos y otros merecen más tiempo. Los de Victoria Álvarez entran en este segundo grupo. Y es que esta serie, la de Dreaming Spires, es algo densa y tiene mucha chicha. Hay que estar atento al leer estos libros y enterarse bien de todo lo que los protagonistas van descubriendo, pues puede tener relación con sucesos posteriores. Tu nombre después de la lluvia me fascinó y Contra la fuerza del viento me ha enamorado por igual. No sabría decir cuál de los dos me ha gustado más, tal vez el primero porque el tema de la banshee me parece más llamativo, porque fue cuando conocí y me enamoré de Oliver, Lionel y Alexander, pero sin duda este segundo está muy a la altura y la trama del Perséfone me ha dejado encantada.

Encontrarme de nuevo con estos personajes tan carismáticos es una delicia. Sigo teniendo dificultades para elegir solo a un personaje de esta serie, pues todos ellos tienen algo especial. Oliver me enamoró en el primer libro y lo ha vuelto a hacer; es un romántico y eso siempre, siempre me va a gustar en un personaje. Lionel me parece un granuja encantador al que en esta segunda parte descubriremos el lado más tierno. De Alexander opino que es un buenazo y un hombre muy sensato, me lo imagino con un rostro amigable y una sonrisa eterna, tal vez una mezcla de Robin Williams (por su cara enternecedora) y Richard Gere (por supuesto, el Alexander de mi mente tiene canas que lo hacen más atractivo). Pero esto no tiene relevancia alguna. Por otra parte, el elenco femenino sigue fascinándome. La señorita Stirling es lo más, a pesar de que la autora la ha reblandecido un poco en este libro, y Veronica sigue provocando en mí un interés especial, este personaje me intriga y me gustaría que se le diera más protagonismo en un futuro. Ailish, por su parte, poco aparece, pero es fácil encariñarse de esta mujer por lo feliz que hace a Oliver y los  sentimientos que este tiene por ella.

De Victoria Álvarez siempre me ha gustado el manejo que tiene en el tema de la documentación. Me quedo alucinada cuando leo pasajes tan detallados y con información tan específica. Veo en los agradecimientos que, efectivamente, sigue un proceso de documentación importante. Me parece que hace un trabajo impecable. Me gusta de sus historias cómo se mezcla la leyenda con la realidad, la historia con la ficción. En todas sus novelas (aún me falta una por leer) hay elementos paranormales, pero sus historias no son de fantasía, y eso me gusta, porque trata los temas como si realmente pudieran ser verídicos, porque los protagonistas son gente normal y corriente que se enfrenta a casos extraordinarios y le dan la importancia que merecen.

El único encontronazo que he tenido con este libro ha llegado al final. No tengo claro si me ha gustado o no, lo que me lleva a plantearme si no me he vuelto más blanda yo también: antes me encantaban los finales trágicos y ahora solo quiero finales felices. Lo que sí sé es que el final de Contra la fuerza del viento me ha roto el corazón. Bah, a quién voy a engañar, ¡soy una masoquista!, ¡me ha encantado!


Que Victoria Álvarez es una de mis autoras preferidas es un hecho, que cada una de sus novelas me sorprende es también verdad. Hay autores que escriben bien y otros que tienen ideas geniales. Ella lo tiene todo y eso no se encuentra tan fácilmente hoy día: tiene un estilo impecable, cuida hasta el más mínimo detalle en sus historias llevando a cabo un proceso de documentación importante, escribe tramas interesantes y crea unos personajes de diez. Con Contra la fuerza del viento ha vuelto a dejarme sin palabras (y sin lágrimas).

♬ Reseña de Tu nombre después de la lluvia ♬