Live, Javier Ruescas
Editorial: Montena
461 páginas
Tras su aventura americana, los hermanos Serafin retoman sus carreras artísticas en España: Aarón es un músico de éxito asediado por fans y paparazzi mientras que Leo intenta con poca fortuna triunfar como actor. Al final, parece que la vida lejos de Develstar no resulta tan fácil como esperaban...
Su salvavidas será Ícaro: su amigo americano les propone un viaje por Europa sin preguntas y con los gastos pagados. Ellos solo deben preocuparse de encontrar acompañante... y de pensar a lo grande.
Empieza así un road trip lleno de música improvisada y conversaciones acompasadas en el que secretos y confesiones lograrán sellar amistades y despertar nuevos y viejos amores. Al fin y al cabo, lo importante de la vida es vivirla con intensidad.
(Texto extraído de la contracubierta del libro)
Esta es una de esas sagas que al principio no me terminaba de atraer pero a la que decidí dar una oportunidad y acerté. Play me gustó y Show me gustó todavía más, por lo que estaba deseando leer Live, la tercera y última parte de la serie. Aunque me ha gustado, también me ha resultado el más flojito de los libros, y a continuación hablaré de las razones.
Estos libros, ante todo, me parecen frescos, ágiles, muy fáciles de leer. Con Live, sin embargo, he tenido más dificultades, y es que me ha costado cogerle el ritmo y engancharme. En Play teníamos todo el rollo de la fama, del grupo de Youtube, el viaje de los protagonistas a NY; en Show, estaba el tema del reality show que, a decir verdad, me encantó. En Live contamos con un road trip que, aunque tiene su gracia, tampoco es que resulte muy, muy interesante y mucho menos intrigante. Pero sí, me ha gustado, porque los personajes tienen gracia y porque también hay giros y secretos. ¿Secretos? Sí que hay algunos, y uno de ellos muy gordo, pero que yo me olí desde el minuto cero; en cuanto se organizó lo del viaje ya tenía en mente la posible razón y no me he equivocado. De todas formas, aun sabiendo lo que iba a pasar, el final me ha emocionado y me ha hecho soltar alguna que otra lagrimilla (y mira que estaba casi segura de que no iba a llorar). El libro se lee bien, a pesar de que, como ya he dicho, a mí me costó cogerle el ritmo y de que, además, se hace un poco pesado en algunas partes, pero Ruescas sabe cómo ganarse al lector, eso está claro, tiene un estilo fresco y desenfadado. Además, este libro es muy friki (y no es una crítica), pues si el autor ya nos tenía acostumbrados a las referencias literarias (sobre todo a Harry Potter), en este también habrá referencias a series y a youtubers conocidos.
Los personajes son, a mi modo de ver, lo que más destaca en este tercer libro de la serie. Volvemos a tener de protagonistas a nuestros hermanos Serafin, pero, además, aparecen personajes del segundo libro como Ícaro, Zoe, Emma y algunos de los chicos de T-Stars. Si bien es cierto que siempre me he posicionado del lado de Aarón (aunque en Show empezó a gustarme bastante Leo), en este caso ha sido el hermano mayor el que más me ha convencido. Me explico: en la vida real, posiblemente me gustara alguien más como Aarón: el chico dulce, bueno, tímido... Pero como personaje, Leo tiene más tirón y resulta más interesante. Además, en este libro Aarón pierde mucho con todas sus dudas y sus líos amorosos. No me ha convencido el triángulo amoroso y no me ha convencido las reacciones de las chicas implicadas. Leo, sin embargo, me ha gustado mucho y me he alegrado por él por ciertas cosas que le pasan en este libro. Zoe, que tanto me gustó en Show, aquí pierde protagonismo y queda más en un segundo plano y Emma, que salió menos en Show, aquí tiene más tirón. Otro de mis personajes favoritos es Ícaro, tan carismático, con tanta personalidad y Selena, una periodista que aparece por primera vez en este libro, me ha convencido.
No me queda mucho más que decir. El libro me ha gustado bastante, aunque los otros dos me parecieron mejores; considero que los personajes son muy buenos y que ese final agridulce es muy aceptable. Me gusta ese puntito friki, aunque me gusta cuando las referencias son conocidas para mí (no he visto Doctor Who y las canciones que comienzan los capítulos no me decían mucho). Confieso que voy a echar de menos a los hermanos Serafin.
Live es el más flojito de la serie Play, aunque es buen libro. El ritmo, aunque más pausado al principio, sigue siendo ágil y los personajes son muy buenos. Da pena que la historia acabe como lo hace, pero a mí, tan dada a los dramas, me ha gustado y me ha emocionado. No me ha decepcionado.
Estos libros, ante todo, me parecen frescos, ágiles, muy fáciles de leer. Con Live, sin embargo, he tenido más dificultades, y es que me ha costado cogerle el ritmo y engancharme. En Play teníamos todo el rollo de la fama, del grupo de Youtube, el viaje de los protagonistas a NY; en Show, estaba el tema del reality show que, a decir verdad, me encantó. En Live contamos con un road trip que, aunque tiene su gracia, tampoco es que resulte muy, muy interesante y mucho menos intrigante. Pero sí, me ha gustado, porque los personajes tienen gracia y porque también hay giros y secretos. ¿Secretos? Sí que hay algunos, y uno de ellos muy gordo, pero que yo me olí desde el minuto cero; en cuanto se organizó lo del viaje ya tenía en mente la posible razón y no me he equivocado. De todas formas, aun sabiendo lo que iba a pasar, el final me ha emocionado y me ha hecho soltar alguna que otra lagrimilla (y mira que estaba casi segura de que no iba a llorar). El libro se lee bien, a pesar de que, como ya he dicho, a mí me costó cogerle el ritmo y de que, además, se hace un poco pesado en algunas partes, pero Ruescas sabe cómo ganarse al lector, eso está claro, tiene un estilo fresco y desenfadado. Además, este libro es muy friki (y no es una crítica), pues si el autor ya nos tenía acostumbrados a las referencias literarias (sobre todo a Harry Potter), en este también habrá referencias a series y a youtubers conocidos.
Los personajes son, a mi modo de ver, lo que más destaca en este tercer libro de la serie. Volvemos a tener de protagonistas a nuestros hermanos Serafin, pero, además, aparecen personajes del segundo libro como Ícaro, Zoe, Emma y algunos de los chicos de T-Stars. Si bien es cierto que siempre me he posicionado del lado de Aarón (aunque en Show empezó a gustarme bastante Leo), en este caso ha sido el hermano mayor el que más me ha convencido. Me explico: en la vida real, posiblemente me gustara alguien más como Aarón: el chico dulce, bueno, tímido... Pero como personaje, Leo tiene más tirón y resulta más interesante. Además, en este libro Aarón pierde mucho con todas sus dudas y sus líos amorosos. No me ha convencido el triángulo amoroso y no me ha convencido las reacciones de las chicas implicadas. Leo, sin embargo, me ha gustado mucho y me he alegrado por él por ciertas cosas que le pasan en este libro. Zoe, que tanto me gustó en Show, aquí pierde protagonismo y queda más en un segundo plano y Emma, que salió menos en Show, aquí tiene más tirón. Otro de mis personajes favoritos es Ícaro, tan carismático, con tanta personalidad y Selena, una periodista que aparece por primera vez en este libro, me ha convencido.
No me queda mucho más que decir. El libro me ha gustado bastante, aunque los otros dos me parecieron mejores; considero que los personajes son muy buenos y que ese final agridulce es muy aceptable. Me gusta ese puntito friki, aunque me gusta cuando las referencias son conocidas para mí (no he visto Doctor Who y las canciones que comienzan los capítulos no me decían mucho). Confieso que voy a echar de menos a los hermanos Serafin.
Live es el más flojito de la serie Play, aunque es buen libro. El ritmo, aunque más pausado al principio, sigue siendo ágil y los personajes son muy buenos. Da pena que la historia acabe como lo hace, pero a mí, tan dada a los dramas, me ha gustado y me ha emocionado. No me ha decepcionado.
Todavía no he leído nada de este autor, creo que debo de ser la única en toda la blogosfera, pero de todos sus libros puede que empiece con esta trilogía porque me parece la más fresca y entretenida. Es una pena que te haya parecido un poquito más flojo que los anteriores, siempre da pena que el desenlace de una trilogía decaiga, pero en general me ha transmitido buenas sensaciones tu reseña como para darles una oportunidad muy pronto.
ResponderEliminar¡Un beso!
En general estoy de acuerdo, aunque a mí me gustó más que el primero :)
ResponderEliminarEstoy de acuerdo contigo, este ha sido el más flojo de los 3. El que más me gustó fue Play y el final de la teiñogía me ha parecido a la altura. ¡Nos leemos! Besos :)
ResponderEliminarYo dejé la trilogía con el primero, porque aunque me resultó muy entretenido, no me parecía nada del otro mundo y no tenía ganas de continuar con la saga.
ResponderEliminarUna lástima que te haya parecido el más flojo.
¡Un beso!
Aunque he leído algún libro de este autor, todavía no he leído ninguno de esta trilogía. El argumento no me llama mucho, pero sí que haya referencias frikis, especialmente de Doctor Who.
ResponderEliminar¡Saludos!
Es una pena que te haya decepcionado este último libro, yo la verdad es que por el momento aun no me animo ha empezar la trilogía.
ResponderEliminar¡Saludos!
El primero no me gustó nada así que decidí no continuar la trilogía.
ResponderEliminarUn beso.
Hola! Tengo ganas de empezar esta trilogía, a ver cuando me animo. Gracias por la reseña, besos!
ResponderEliminar¡Hola! Pues leí el libro Play y la verdad es que se me hizo lento, los personajes no me cayeron bien, pero el argumento me gustó. No sé si continuar con la saga o qué hacer...
ResponderEliminarMe alegro de que te haya gustado la trilogía a pesar de ser, este último, el más flojo.
Un besito :)
Hola, a mi no me llama especialmente, no creo que llegue a empezar la serie. Del primero no leí muy buenas críticas, así que lo descarte.
ResponderEliminarBesos:)