Editorial: Casterman
Lengua: francés
188 palabras
Georges tiene una nueva vecina; ella es mayor que él y no vive más que con su perra Nadja. Georges no sabe cómo se llama, pero no ha dudado en el nombre que quiere que tenga: Arsène. Arsène porque esta chica es su segunda persona preferida, Arsène porque su primera persona preferida es Arsène Wenger, entrenador del Arsenal, comentarista de fútbol. La chica no puede ser más afortunada por llevar tal nombre, no cualquiera tiene la suerte de poder llevarlo. Para Georges, Arsène es una chica superespecial, es su amor platónico, la chica más guapa y más fantástica que ha conocido nunca. Pero Arsène le dobla la edad, él es solo un niño, y ella es toda una mujer.
Compré Arsène por dos motivos: por su cubierta, tan llamativa y atractiva; y porque la historia está narrada por un niño, y suelen gustarme este tipo de libros. Además, Georges es un niño que está enamorado de su nueva vecina, que le dobla la edad, que es una persona adulta. Georges es un chico muy especial, con sus manías, con sus gustos y sus héroes: el que más, Arsène Wenger, entrenador de un equipo de fútbol, y le gusta porque sí, no tiene que dar explicaciones; bueno, sí, también porque se parece a su abuelo de Pornic, y este murió, pero le queda su abuelita, que es la mejor abuela del mundo. En el mundo de Georges también está Lita, una pequeña portuguesa que es hija de la conserje del edificio donde vive el chico. Lita es su mejor amiga, su compañera de confidencias y juegos, una chica que sueña con ser médico. Y, por supuesto, también está Arsène, una chica que acaba de llegar al edificio con su perra, Nadja; parece tener una vida complicada, a su puerta acuden muchos hombres, pero solo una noche. También conoceremos a algunos de los profesores de Georges, a sus padres, al señor Ali, a la magnífica abuela de Pornic. En Arsène, no solo narra el protagonista, también podremos saber cuáles son los pensamientos de otros personajes más secundarios, pero que tienen cosas interesantes que contarnos sobre Georges.
Arsène es un libro muy entretenido; no es la novela del año, para nada, no podría serlo, pero es emotivo y divertido. El protagonista tiene una forma de contar las cosas que, cuando menos, hace sonreír y sentir ternura por él. Se lee muy fácil y aunque puede que no deje huella, sí que deja una enorme sonrisa en los labios, por Georges, que, al fin y al cabo, es un crío.
Arsène es emotivo, divertido, entusiasta y rebosa ternura. Su protagonista no es más que un niño y le da un toque de dulzura a la novela, la dulzura de un niño enamorado de una chica mayor, que para él es todo su mundo y está dispuesto a cualquier cosa por ella.
Pues la verdad que no me llama mucho el libro, pero nunca se sabe igual lo termino leyendo cuando no tenga que leer.
ResponderEliminarUn beso
La verdad es que el libro no me llama demasiado la atención, pero quizá saco algo de tiempo y dinero para leérmelo ^^
ResponderEliminarBesos
Me gustan esta clase de historias que no son lo que se suele encontrar, lejos de ser populares siempre contienen una buena historia para leer.
ResponderEliminarMmmm no había escuchado hablar de este libro y aunque no parezca una "gran novela" a veces es bueno leer sólo una buena historia.
ResponderEliminarSaludos n.n