Puro, Jennifer L. Armentrout

Puro, Jennifer L. Armentrout

Traductora: Verónica Blázquez

Editorial: Ediciones Kiwi

391 páginas
Puede tener spoilers de la primera parte

Está la necesidad. Y luego está el Destino.

Estar destinada a convertirse en un enchufe sobrenatural no es precisamente algo genial, especialmente cuando la "otra mitad" de Alexandria la sigue allá donde va. Y que, además, Seth aparezca en su sala de entrenamiento, al salir de las clases y también en la puerta -o ventana- de su dormitorio, definitivamente no es nada genial. Aunque su conexión tiene algunos beneficios, como alejar las pesadillas que envuelven lo ocurrido con su madre, no tiene efecto alguno sobre los sentimientos prohibidos que tiene Álex por el puro Aiden. Ni sobre qué va a hacer -y sacrificar- él por ello.

Cuando los daimons se infiltran en los Covenants y atacan a los estudiantes, los dioses envían a las furias, diosas menores con la función de erradicar cualquier amenaza para los Covenants y el resto de los dioses, incluyendo al Apollyon y a Álex. Y si eso y las hordas de monstruos chupadores de éter no fueron suficiente, una amenaza misterioso parece dispuesta a hacer cualquier cosa por neutralizar a Seth, incluso si eso supone forzar a Álex a la servidumbre o matarla.

Cuando se involucra a los dioses, algunas decisiones ya no tienen vuelta atrás.

(Texto extraido de la contracubierta del libro)

Hay libros que son un descontrol para mí, libros que me dejan con un noséquéraro en el cuerpo, libros con los que no me aclaro, que no sé si me han gustado o no. Puro es uno de estos libros. Si recordáis bien (y si no, yo os lo recuerdo), Mestiza fue para mí un boom, un libro estrella, una maravilla, un woooomenudolibrohedescubierto. No tenía una historia original, pero tenía unos personajes que me  conquistaron, sobre todo, la protagonista: una chica guerrera, que tiene más cara que espalda, que está siempre metida en líos, que no duda a la hora de liarse a puñetazos con alguien, que tiene un carácter fuerte y que es una inconformista. Esa es Álex, la de Mestiza, pero también la de Puro, aunque en esta ocasión había veces en que me daban ganas de decirle: ¡chiquilla, tranquilízate! Porque no le gusta estar callada y porque a la de nada salta, y en ocasiones me hace reír esta actitud o me hace admirarla, pero en otras resulta un poco excesivo. Aun así, aunque Álex tiene sus más y sus menos en este libro, sigue gustándome, y sigo considerándola una pedazo de protagonista, como las que hacen falta en muchos libros juveniles.
Por otra parte está el triángulo amoroso. En Puro no tenemos uno realmente definido, porque en realidad Aiden no tiene nada con Álex, solo que se nota a leguas que está enamorado de ella pero que no lo quiere admitir por las consecuencias, y porque Álex no está enamorada de Seth, a pesar de que él bebe los vientos por ella. No obstante, ahí están los tres, y que si ahora me encanta Aiden, que si Seth ha ganado puntos, que si a ver qué decide esta chica al final. Suele ser común en los autores de sagas juveniles que en un primer libro haya chico+chica y que esté claro que van a acabar juntos, y que luego en el segundo libro haya chico+chica+chico, que además este chico nuevo sea un encanto y encandile al lector. Yo sigo decantándome por Aiden, porque Seth me gusta, pero no lo veo para Álex, quizás porque son demasiado parecidos.

-Si no fueses un puro, ¿qué estarías haciendo ahora? Quiero decir, ¿qué querrías hacer con tu vida? Aiden bajó la vista hacia nuestras manos y luego hacia mí. -¿Justo ahora? Estaría haciendo muchas más cosas de las que me están permitidas.

En cuanto a la historia, he de decir que me costó engancharme, pero que pronto Álex volvió a conquistarme (a pesar de lo que he dicho anteriormente). La trama no está mal, pero como decía Nia en su reseña, cuando terminas el libro, te plantas y piensas: ¿qué es lo que hemos avanzado?  Sí, pasan cosas, y la verdad es que acción hay, pero no hay grandes avances, ni en tema de Apollyons, ni en las relaciones de los personajes, ni en la trama de los daimons... nada, solo unas cuantas advertencias a Álex y un lío amoroso.

Hay otro detalle que me gustaría comentar porque para mí ha sido absolutamente... desesperante: la cantidad de palabras en cursiva que hay en el libro. Estoy casi segura de que son palabras que estaban en cursiva en el original y que la traductora ha dejado igual... y desde aquí reivindico el cese del uso de la cursiva porque sí, porque en inglés se utiliza para una cosa y en español para otra, y porque tanta cursiva cansa, cansa y cansa.

A pesar de todo esto, está la otra parte de mí que ha disfrutado leyendo Puro, que ha tenido ganas de chocar esos cinco con Álex, que se ha emocionado con las miradas que lo dicen todo. Esa parte de mí que no duda en darle un voto de confianza a esta saga, porque la primera parte para mí fue un 5/5 y porque, aunque esta se quedara en un aprobadillo justo, confía en que la tercera parte remontará y volverá a enamorarme. Confío en Álex y confío en Armentrout. Espero que no me defrauden.

Puro ha sido una pequeña decepción después de haber leído Mestiza que tanto me enamoró. No obstante, la historia no está mal, y estoy segura de que es un paso atrás para tomar impulso y lucirse en la tercera parte.

♬ Con la colaboración de Ediciones Kiwi ♬
♬ Reseña de Mestiza ♬