Del suelo al cielo, Regina Roman

Hace ya bastante tiempo que tenía ganas de leer una nueva psico-comedia de Regina Roman, no es ningún secreto que me encantan sus libros. Tenía este en versión e-book pero no me animé a leerlo por no tener e-reader. Pero ahora ha salido publicado por Clessidra editorial y por fin he podido leerlo... ¡qué ganas tenía de conocer a Antoñita la fantástica!

Del suelo al cielo, Regina Roman

Cayetana es una ricachona, una mujer con estilo, glamourosa, segura de sí misma, no tiene carencias ni sabe vivir sin derrochar. Pero no siempre ha sido así. Cayetana de Ojeda no es su verdadero nombre, sino el que eligió después de mudarse a la capital y casarse con un viejete podrido de dinero con el apellido de Ojeda. Antes ella era Antonia María García, o Antoñita Mari como la llamaba su madre. Y es que Cayetana vivió su infancia y juventud en un pueblo malagueño que ni aparece en los mapas, en el seno de una familia pobre. Ahora reniega de su pasado y se ha inventado otro mucho más chic. Pero eso no queda ahí, y es que Cayetana miente y miente sin parar, inventándose una vida diferente a la suya, creyéndose mejor que nadie y desvalorando a los que no están a su altura. Su psicoterapeuta le dice que es mitómana, pero ella no quiere creerle.

Un día, recibe una llamada de la embajada sueca y tiene que viajar a Estocolmo a recibir una herencia que le ha dejado su padre. No el del pueblo, sino su verdadero padre, uno sueco del que ella nada conocía. Ha heredado un palacete en Madrid, pero el problema llega cuando se entera de que hay un copropietario que ha heredado la mitad de la vivienda. Neil, un sueco adoptado por el padre de Cayetana, quiere comprar a Caye la mitad del palacete, pero esta no le pondrá las cosas fáciles.

Mi regla general es que antes de las once, el cerebro no me lo he puesto todavía. A eso de las doce me enchufo y me despabilo con un buen capuchino de Hatti, mi doncella filipina, y a partir del medio día, empiezo a soportar una llamada de teléfono. Pero que sea cortita, que pierdo los nervios con bastante facilidad.

Siempre me parecen curiosos los comienzos de las novelas de Regina Roman, y en este caso no ha sido para menos.

En esta ocasión, Roman nos divierte con una psico-comedia cuyo tema principal es la mitomanía, ese trastorno mediante el cual una persona no para de mentir y mentir. La historia de Cayetana tiene tela. Creo que no puede haber un perfil de mujer que pueda resultar más detestable y desagradable que el de ella. Cayetana es la típica mujer con la que mejor llevarse bien, por el bien propio. Aunque el tema principal sea la mitomanía, no es el único, y es que Del suelo al cielo nos habla de el exceso de confianza en uno mismo, de los riesgos de quererse demasiado que, en ocasiones, puede derivar de que una persona no se quiere en absoluto, de la vergüenza. Cayetana tiene demasiada confianza en sí misma, se cree invencible y se considera la más guapa y la más todo, y es por ello que no tiene ningún reparo a la hora de discriminar, criticar y desprestigiar. Sin embargo, detrás de esta fachada de mujer de acero hay una historia, y es que Cayetana intenta por todos los medios que nadie conozca su vida antes de llegar a Madrid. Se avergüenza de ella misma, de su familia, de su anterior yo. Y miente, para esconder su pasado, para parecer mejor, más glamourosa y más rica de lo que es. No por méritos propios, por cierto. 

Mi atención resbaló a sus manos que imaginé adentrándose en lugares privados de mi gloriosa anatomía. Noté un temblor en el vientre que me llevó a recapacitar.

Del suelo al cielo es una novela divertida, fresca, con un toque de humor un tanto especial, ya que la protagonista no será del gusto de todos los lectores. Su ritmo es muy ágil, como el de las otras novelas de Regina Roman, y se lee muy rápidamente. Yo estoy en una época en la que me apetece leer libros que me hagan reír y sonreír, y este lo ha conseguido, vaya si lo ha conseguido. 

La narración de la autora, como siempre, es muy cercana. Hay mucho lenguaje de la calle. Además, me ha hecho gracia que, aunque Cayetana intenta parecer una mujer chic y culta, a veces le sale su vena ordinaria y suelta cada frase...

Con respecto a los personajes, poco más tengo que decir de Cayetana, la protagonista. Neil es la representación masculina de la novela, un hombre que, como no podía ser menos, es guapísimo y perfectísimo. A mí me ha encantado. Volveremos a encontrarnos con Marina, uno de los personajes de Un féretro en el tocador de señoras, que es la mejor amiga de Cayetana. La pobre no sabe decir que no, y es un cielo de chica. También aparece, aunque en muy pocas ocasiones, Olivia, protagonista de Un féretro en el tocador de señoras. Me gustaría mencionar también, aunque brevemente, a Pedro, el psicoterapeuta de Cayetana, porque me hizo una gracia tremenda que intentara hacer creer a sus pacientes que quisieran ser prostitutas, y a las hermanas de Caye: Reme y Leonor, porque me ha gustado mucho su papel y me han parecido tan inocentes y bonachonas... ¡pobrecitas! me hubiera gustado saber algo más de ellas.

La única pega que le pondría a esta novela es que Cayetana es demasiado... ¡ufff! , me ha sacado de mis casillas aunque, en el fondo, también me ha dado bastante pena. No podía ver cómo esta novela pudiera tener un final feliz con una protagonista así, es que la señora señorita no paraba de mentir y era realmente insoportable.

Una vez más, he disfrutado de una novela de Regina Roman que me ha encantado. Sus psico-comedias no me defraudan y cada vez que leo una, me dan más ganas de seguir descubriendo este género que la autora ha creado y que tanto me gusta. 

Ráting Melódico: 

♬ Gracias a Regina Roman  por la novela ♬

 ♬ Reseña de Un féretro en el tocador de señoras ♬

♬ Reseña de Cuarentañeras ♬