Mi hermana vive sobre la repisa de la chimenea, Annabel Pitcher

No había leído ninguna reseña de este libro y, sin embargo, se me antojó. Por un comentario que leí en facebook. Muchas gracias a Leyna que me lo regaló por el amigo invisible que organizó Vero en su blog. 

Mi hermana vive sobre la repisa de la chimenea, Annabel Pitcher

Rose murió hace cinco años en un atentado islamista en Londres. Hace cinco años que su cuerpo voló en pedazos y su familia quedó destrozada. Hoy, sus padres, su hermano Jamie y su hermana gemela Jas la siguen echando de menos y sus cenizas reposan en una urna sobre la repisa de la chimenea. Su madre ha dejado a su padre y se ha ido a vivir con Nigel, su padre se ha dado a la bebida y se ha mudado con sus dos hijos a Ambleside, Jas ha dejado de comer, se ha pintado el pelo rosa y solo se pone ropa negra, a juego con el esmalte de uñas que utiliza y James era muy pequeño cuando murió, muy pequeño como para acordarse de ella o para echarla de menos. James quiere unir de nuevo a su familia, hacer que todo vuelva a la normalidad. Quiere tener una madre que le envíe regalos por su cumpleaños y vaya a las reuniones del cole, un padre que le haga de comer y no se pase el día bebiendo. James quiere una familia normal.

Desde el atentado, en la casa de Jamie solo se escucha Los musulmanes mataron a mi hija. Su padre los detesta, los desprecia y los ve a todos como terroristas. Pero cuando Jamie entra en el colegio nuevo de Ambleside, conoce a una niña llamada Sunya que lleva un hiyab en la cabeza, una niña que se convertirá en su única y mejor amiga.

La sensación que tuve al terminar de leer este libro fue ¡qué historia más maravillosa! y así lo comenté en facebook. Creo que esa es la palabra perfecta para definir esta novela: MARAVILLOSA. Me ha durado tan solo dos días y han sido dos días en los que parar de leer se me antojaba una tarea imposible.

La historia de Mi hermana vive sobre la repisa de la chimenea es especial, mágica. Es una historia diferente y emocionante. Emotiva hasta decir basta. Cada página es mejor que la anterior y te hace vivir mil sensaciones. Habla de los prejuicios, del acoso escolar, del amor, de la familia. Sobre todo de la familia. Es una historia MUY triste, que te hará llorar de pena, pero también de risa. Es una historia realista, muy realista, que te hará ver las cosas tal y como son y ver que hay personas así, que hay familias que viven de esa manera y sentir pena por Jamie, por Jas, aunque también por sus padres.

La narración es uno de los puntos fuertes de la novela, a pesar de que al principio me quedé desconcertada. Todo está escrito bajo la visión de Jamie, de un niño de diez años. No hay diálogos, todo lo que es conversación se inserta dentro de la narración en cursiva. Todo el texto está lleno de opiniones, de sentimientos... y me parece que la autora ha sabido ponerse muy bien en la piel de un niño de diez años y expresarse tal y como lo haría él. De verdad, chapeau por ella. Jamie nos va contando el presente, pero lo intercala con sus recuerdos del pasado o con lo que su familia le ha contado, ya que él tenía solo cinco años cuando su hermana murió y apenas recuerda nada. Toda la historia es muy emotiva, pero es el hecho de que sea Jamie quien nos la cuente lo que hace que sea mucho más impresionante, ya que no sería lo mismo si fuera Jas, su hermana de quince años.

Los personajes están muy logrados y es muy posible ponerse en la piel de cada uno de ellos. Jamie era muy pequeño cuando su hermana murió, apenas la recuerda y no comprende cómo su familia puede seguir obsesionada con ella después de cinco años. Es un niño tímido e introvertido, le cuesta hacer amigos y sufre acoso escolar. Quiere tener una vida normal, pero sobre todo quiere a su familia por encima de todo y necesita que todo vuelva a ser como antes de morir su hermana. 

A la hora de comer intenté hacerme algún amigo. Aquí no quiero que me pase como en Londres. En mi antigua escuela todos me llamaban Nenaza porque me gusta dibujar, Cerebrín porque soy inteligente y Bicho raro porque me cuesta hablar con gente a quien no conozco. Jas me ha dicho Es importante que te hagas amigos esta vez, y su forma de decírmelo me ha hecho sentirme incómodo, como si ella supiera que en Londres me pasaba los recreos en la biblioteca en lugar de en el patio.

Jas, la hermana de Jamie, era también la hermana gemela de Rose. Ha dejado de comer, tiene el pelo rosa y viste entera de negro. Aunque a primera vista parezca la más fuerte de la historia, no lo es, y sufriremos al verla desmoronarse, al conocer sus sentimientos reales. Ha sido la sombra de Rose mientras ella vivía y ahora ni siquiera eso. Sunya, la amiga musulmana de Jamie, es, como la describe la autora, un rayo de luz. Diría que es una de mis personajes favoritos, pero es que también lo son Jamie y Jas. Es buena con James, lo acepta cuando él está solo, sufre con él, lo ayuda... quiere, por encima de todo, ser su amiga y poder comprenderlo, y hacerlo reir. Los padres de James son arena de otro costal. El padre es el que vive con ellos, pero no se ocupa para nada de su pequeña familia. Vive anclado en el recuerdo de Rose, de su maravillosa hija, y no comprende que tiene otros dos hijos que siguen vivos. Se ha dado a la bebida, se pasa las horas borracho en casa, sin hacer nada. Además, ha desarrollado un fuerte odio hacia los musulmanes que, según él, son todos iguales. De la madre, por el contrario, poco sabremos hasta casi el final, solo lo que Jamie nos cuenta. Ella abandonó a su marido y se fue de casa. No saben nada de ella desde el día que salió por la puerta. Jamie la adora, y la tiene idealizada.

[...] que agradable sería coger el teléfono como un adulto y encargar una vida diferente como si fuera una pizza o algo así. Pediría un padre que no bebiera y una madre que no se hubiera largado, pero a Jas no la cambiaría en lo más mínimo.

Por último, no puedo dejar de comentaros algo sobre el final. Tranquilos, no tiene spoilers, solo quiero decir que ese final me arrancó un montón de lágrimas, que me dejó con una sonrisa de oreja a oreja y que me pareció un broche de oro perfecto para esta maravillosa historia.

Mi hermana vive sobre la repisa de la chimenea es una historia que recomendaría a todo el mundo, sea cual sea su edad. Es cierto que la narración es un poco extraña al principio, pero luego te das cuenta de que la diferencia la hace aún más especial. Es una historia maravillosa, con la que llorar de risa, pero también de pena. Es una novela triste, con unos personajes fantásticos, muy creíbles y muy bien perfilados y un final muy a la altura.

Ráting Melódico: